miércoles, 27 de enero de 2016

LA CÁRCEL.

       Es terrible el tener que estar viviendo en la cárcel.

       Resulta muy difícil soportar el paso de los días meses y años, sin sufrir el daño inmenso que produce la falta de libertar.

       Caminar, hablar, reír, comer… vivir es todo totalmente distinto en la cárcel, de lo que se hace en la vida normal.

       Miramos distinto y cada día vemos peor. También caminamos diferente. Todo es de otra manera aquí en la cárcel.

       Nadie debería estar en la cárcel. Ni siquiera tendrían que existir las prisiones, los penitenciarios, ni los presidiarios.

       Los que hablan y hablan en los medios de cómo y porque son y cómo deben ser las cárceles, en su mayoría desconocen todo sobre lo que refiere a la cárcel.

       Los que encarcelan también en su inmensa mayoría tienen un total y absoluto desconocimiento de cuál es la realidad del lugar donde ellos confinan a personas. La cárcel.

       Pensar que los que pueden decidir quién, cuándo y cómo una persona ingresa en la cárcel; son los mismos que cometen delitos criminales como es el encubrir a narcotraficantes, o a políticos corruptos y asesinos, resulta de una repugnancia inadmisible para alguien que lo tiene que soportar estando preso, privado ilegalmente de la libertar.

       El juez, la cárcel y el carcelero tienen que ser nuevamente reformulados. Si queremos tener una mínima oportunidad para salvar a nuestra civilización, tenemos que entender que tanto el juez como la cárcel con su carcelero tienen que desaparecer.

       La cárcel queda marcada en lo más profundo del ser. Incluso aunque no resulte violenta ni traumática en su forma cotidiana; la falta de libertad, la presión y “tortura” psicológica que uno está obligado a soportar, hacen de la cárcel el peor lugar donde un ser humano tenga que vivir.

       Llegar a perder el contacto visual con tu propio cuerpo, ya que los espejos suponen prohibición. Dejar de tener relación directa y cotidiana con el mundo exterior. Estar obligado a no poder comer o beber de acuerdo a tu gusto o elección. Tener controlado todo….Así es la cárcel.

       ¡¡Malditos jueces corruptos que a sabiendas tienen presos en la CÁRCEL a inocentes!!

       Valentín Temes Coto.

ES COPIA LITERAL DEL ESCRITO HECHO POR VALENTIN

Lolo Temes Coto.


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