Hoy en
día cualquiera de nosotros podemos plasmar nuestras opiniones en las varias
redes sociales, sin necesidad de tener que constatar la veracidad de nuestros
dichos. Incluso estando privado de la libertad –como es mi caso-, puedo
escribir estas notas de opinión que mi Hermano presenta en nuestro Blog. Son
cientos y miles, los periodistas que diariamente llenan horas y horas de
programación en tv y radio, presentando sus comentarios como si fuesen verdades
reveladas, aun cuando en la mayoría de los casos solo podemos encontrar simples
“chismentos” faltos de la más mínima veracidad. También está la simple y fácil
posibilidad, que cualquiera tiene de escribir un libro, o dar los más
escandalosos y ordinarios argumentos de vivencias personales, para que un “taquígrafo”
se convierta en escritor.
Estamos
ante una sociedad con exceso de información, y también con gran exceso de
medios para recibir toda esa saturación de noticias e informaciones, que nos
hacen sentir como ciudadanos informados y conocedores de la actualidad, y
también de cualquier tema que se tercie. Es así porque aún cuando escucha o lee
algo que desconoce, hace un clic en internet y obtiene inmediatamente los
datos que precisa para tener opinión propia de algo que desconocía totalmente….
¡Maravilloso! ¿?
Es la
Edad Media transcribir un libro le suponía entre cinco y diez años a uno de
aquellos religiosos aplicados. Después cuando apareció la Imprenta se generó
una “revolución” cultural…y hoy en día estamos tan perdidos como muchos de aquellos
religiosos que copiaban los textos sin saber leer ni escribir. Ellos “dibujaban! copiando las letras que
desconocidas. Solo unos pocos sabían cuál era significado real de aquellos
libros. Hoy también son pocos los que conocen y entienden el real significado de
millones de textos y mensajes que circulan por los celulares y computadoras de
millones de personas que son manipulados y direccionadas por esos pocos.
La
profesión de periodista está al igual que la mayoría de los oficios, totalmente
desprestigiada por estar la mayoría de los periodistas al servicio del poder
político y económico de turno.
Son pocas
las noticias de un diario que tienen sustento genuino, y son menos aun las
buenas acciones que las clases gobernantes imponen a la ciudadanía aun con el
“engaño” de las mayorías democráticas.
Estamos
en el s. XXI peor, mucho peor y más degenerados que aquellos nuestros
ancestros que desconocían todo, menos el fuego.
Pongamos
como despedida, y con tono de esperanza, que por lo menos hoy en día podemos
escribir sin censura nuestras opiniones con quejas, y reclamos y críticas.
Valentín
Temes Coto.
NOTA COPIADA DEL ESCRITO DE VALENTIN.
Lolo Temes Coto
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