Somos tan irracionales, que en la mayoría de nuestros
pensamientos presentamos posturas extremas e incluso para situaciones
cotidianas. Así es que unos nos manifestamos a favor de la pena de muerte y
otros en contra. Al mismo tiempo defendemos el derecho de una mujer para
abortar, mientras otros condenan por crimen a esa mujer que decide abortar.
Muchos desprecian y tratan de asesinos y genocidas a todos los que profesan una
determinada religión distinta de la suya, sin tener en cuenta que también su
propia religión asesino y masacró culturas enteras mientras conquistaban sus
tierras y se apoderaban de sus riquezas. Y muchas, muchas cuestiones más que
dan clara muestra de la irracionalidad generalizada en el ser humano.
¿Quiénes,
cuando, como y porque, unos tienen la razón y otros no?
¿Es
posible que cuestiones como poder o no poder quitar la vida a un semejante,
puedan tener dos opiniones totalmente opuestas y enfrentadas?
Religiones
e ideologías políticas fracasaron desde miles de años al tratar de establecer
la racionalidad de las más diversas cuestiones planteadas. Y tanto los
religiosos como los políticos tienen sus manos manchadas de sangre desde el
principio de los tiempos.
Por lo
tanto creo que solo podemos encontrar cierta racionalidad buscando el
conocimiento, el saber que nos permita escapar de posturas irracionales aun
cuando estas muchas veces estén establecidas como dogmas que pasan de padres a
hijos.
Leer,
descubrir, pensar, cuestionar, investigar, dudar, preguntar, y….. volver a leer
más y a otros más que nos puedan ayudar a ser menos irracionales y más racionales.
¿Qué mundo
queremos? ¿Cómo queremos vivir? ¿Tenemos opciones? ¿Cómo se puede plantear un
pensamiento general de la sociedad que trate de ser racional? ¿Qué leyes
queremos, quienes nos van a representar? ¿Somos todos tan distintos, que no
podemos conseguir tener acuerdos que dejen en claro lo que es, y no es
racional? ¿Será que somos tan cobardes que tenemos miedo a pensar por nosotros
mismos, y a decidir por nuestro propio raciocinio?
No tengo
respuestas a tantas preguntas. Pero lo más preocupante y feo para mí, es que
tampoco tengo esperanzas ciertas, de que más allá de la voluntad de muchos,
solo algunos podamos cambiar.
Valentín
Temes Coto.
LITERAL COPIA DEL ESCRITO DE VALENTIN
Lolo Temes Coto.
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