miércoles, 30 de abril de 2014

MANZANAS BLANCAS, LA CAUSA ARMADA


MANZANAS BLANCAS, LA CAUSA ARMADA

Este primer titular es tan contundente como verídico, esta causa fue armada y ahora alguien quiere que paguen injusta e inocentemente los imputados, los cuales, lo único que tienen en común, es en que formaban parte de una empresa que comercializaba manzanas desde Allen, Río Negro, en Argentina, y éstas eran  exportadas a Europa.
Una actividad de lo más normal dentro del mundo empresarial, pero que bien por la traición de gente cercana a Valentín Temes Coto, en colaboración de a saber quién más, o bien por cuestiones totalmente ajenas a nuestro conocimiento, se gestó esta causa en la que los verdaderos organizadores de la trama utilizaron clandestinamente la infraestructura legal de los empresarios tratar de llevar a cabo sus ilícitos propósitos.
Me expreso con conocimiento total del sumario y estoy dispuesto a realizar cualquier aclaración sobre el tema, por mínimo que sea detalle, a cualquier interesado, pues en la causa se demostró que las personas imputadas no tuvieron absolutamente nada que ver en todo este entramado. Durante el juicio, que duró catorce largos meses, las acusaciones –tanto Fiscal como Querella- nada probaron en contra de los tres inocentes –Valentín Temes Coto, Nelson Hinricksen y Claudio Maidana-. Por contra las defensas sí dejaron patente, y con pruebas concretas, que los responsables eran otras personas y no los tres allí sentados en el banquillo.
La Sentencia está basada en infundadas teorías y suposiciones, sin base ni prueba alguna que las respalde, tratando de justificar que están en lo cierto, y en donde el Tribunal tergiversa cuestiones buscando la imputación por encima de todo y sin aludir en ningún momento a aquello que no pueda ser manipulado con un simple juicio de valor en su propio favor.
Condenaron sin tener en cuenta las pruebas contundentes e irrefutables aportadas por las defensas, como son apertura del contenedor en Bahía Blanca; la apertura del contenedor en la Terminal 4; la violación de los precintos; la desaparición método de ocultamiento; y un largo etcétera que parece no ser tan importante para ellos cuando se trata de demostrar la inocencia de los injustamente acusados. Sin adentrarnos ahora mismo en lo referente a la completa violación de los derechos humanos y la presunción de inocencia.
Por otro lado, cabe destacar el comportamiento irregular de los jueces en las distintas instancias por donde pasó el sumario, todo ha sido denunciado desde hace dos años, es decir, desde el inicio de la instrucción, primero en el Juzgado Penal nº 5, más tarde en la Cámara de Apelaciones y, en última instancia, en el Tribunal Oral Penal.
Esto es el comienzo de varias publicaciones, que iré enviando para conocimiento general.
Quedo a su disposición, para aclarar cualquier duda.
Saludos.
Lolo Temes Coto.